Si bien los automóviles son diseñados para ser utilizados en casi cualquier terreno, existen ciertas limitaciones para su uso. Las más básicas y lógicas envuelven aquellos espacios en donde sea imposible desplazarse en coche. Las otras, en cambio, son las que nos interesan: los factores climáticos.

Los cambios en el clima pueden generar contratiempos que limiten el desempeño de un automóvil, y el clima frío que está presentándose es uno de estos factores. ¡Pero no te preocupes! Como sabes, se deben tomar medidas para poder sacar el máximo provecho a tu coche a la vez que lo cuidas durante su uso, y éstas son sencillas en su mayoría.

Entre las más comunes se encuentran el mantener una buena presión en los neumáticos con el fin de que la temperatura no les afecte, tener en las mejores condiciones la calefacción y contar con una buena batería. ¡Veamos qué implican estas labores!

Qué pasos debemos seguir

Lo más importante es tener nuestro coche resguardado. Lo mejor en caso de que se utilice muy poco es que se mantenga en un garaje. De ser posible se recomienda el cubrirlo con una manta pues el frío es un enemigo fatal para la carrocería, lo mismo que para la batería y la pintura.

Lo siguiente implica el cuidado de los neumáticos. Para ello se debe reajustar la presión cambiando ésta según lo requiera el clima. Con temperaturas muy frías la presión de los neumáticos disminuirá considerablemente, por lo que se requiere aplicar una mayor presión de la habitual durante el tiempo que el clima frío se mantenga.

El siguiente paso es más complicado, pues se debe revisar el estado del vehículo. La revisión de los niveles de refrigerante y la aplicación de anticongelante forma parte de este proceso. Y es que el ver hasta los pequeños detalles tiene su valor. Con esto presente se evitarán daños innecesarios a la maquinaria del vehículo.

Lo último, que es tan importante como asegurar el funcionamiento del sistema de calefacción, es estar atento a los pequeños detalles: impurezas en el aceite, luces que no desempeñan la función esperada y frenos poco atendidos pueden ser un gran peligro.

En estos casos se deben realizar labores preventivas de mantenimiento y revisión, y con estas labores el encontrar otros puntos para garantizar el buen estado del vehículo será pan comido.

En nuestros talleres estamos encantados de recibirte a ti y a tu vehículo para poder revisar el estado del mismo, aconsejándote y recomendándote siempre en cada caso la mejor alternativa y solución.